La cantante mexicana se mostró "algo dispersa y errática" durante una entrevista en España.
ESPAÑA.- De gira de promoción en España, la cantante Paulina Rubio, participó en el popular programa El Hormiguero, pero su euforia desmedida llamó la atención de los espectadores. En las redes se preguntaron si no estaba borracha.
Paulina, de 43 años, entró al set lanzándose en brazos del presentador Pablo Motos y emulando ser un toro. Con una energía desbordada, la artista saludó al público a los gritos y no paró de hacer muecas ante la cámara.
La "chica dorada" participó del show para promocionar su disco Mi nuevo vicio. Sucomportamiento errático y una conversación un tanto fuera de lugar fue la que hicieron todo un fenómeno en las redes sociales.