El Pontífice llegó ayer a Kenia y se reunió con el presidente. Alabó a los kenianos, “bendecidos” por la belleza del país y la abundancia de recursos naturales.
El papa Francisco pidió ayer a los líderes mundiales que se esfuercen para promover modelos “responsables” de desarrollo económico con el objetivo de hacer frente a la“grave” crisis ambiental actual, al reunirse con el presidente de Kenia, Uhuru Kenyatta, en el primer día de su gira por África.
En palabras del Pontífice, “la grave crisis ambiental que afronta nuestro mundo exige cada vez más una mayor sensibilidad por la relación entre los seres humanos y la naturaleza”. “Tenemos la responsabilidad de transmitir a las generaciones futuras la belleza de la naturaleza en su integridad y la obligación de administrar adecuadamente los dones que hemos recibido”, afirmó el Papa en declaraciones que reprodujo la agencia EFE.
Francisco alabó a los kenianos, “bendecidos” por la belleza del país y la abundancia de recursos naturales, por su cultura de la conservación. Según dijo, para construir un orden social “justo y equitativo” es necesario “renovar nuestra relación con la naturaleza”, por lo que animó a los líderes mundiales a buscar alternativas económicas que respeten el medio ambiente.
El Pontífice llegó ayer al aeropuerto de Nairobi, etapa inicial de su primer viaje a África, queademás de Kenia lo llevará a Uganda y a la República Centroafricana.
El líder de la Iglesia Católica fue recibido entre cánticos tradicionales por una delegación derepresentantes de la Iglesia keniana y del gobierno.
La visita del Papa a Kenia fue declarada de alto riesgo ante la permanente amenaza terrorista del grupo yihadista Al Shabab, que durante los dos últimos años ha perpetrado graves atentados en respuesta a la presencia de tropas kenianas en Somalia. Sin embargo, durante el vuelo, al ser preguntado por su seguridad durante el viaje oficial por los tres países,Francisco respondió que lo único que le preocupa son los mosquitos. Por otra parte,monseñor Guillermo Karcher remarcó que Bergoglio “no usa ningún tipo de seguridad, chaleco anti-balas o autos blindados”, y que cada uno de los estados que visita deberá garantizar su seguridad.