Fuentes de la aerolínea de bandera argumentaron –según difunde el diario La Nación- que en realidad Río Gallegos fue incluida como destino más por cuestiones políticas (el vuelo solía ser utilizado por dirigentes kirchneristas) que por una necesidad real.
Otra de las novedades es la decisión de eliminar los vuelos a Brasilia desde el 1° de abril. La resolución se tomó luego de evaluar el rendimiento de la ruta: desde la empresa afirmaron que el destino no era rentable y no había razones que justificaran su continuidad.
A cambio, Aerolíneas incrementará la cantidad de asientos que ofrece para volar a Río de Janeiro y a San Pablo, dos destinos que tienen muchos usuarios (registran un alto porcentaje de ocupación) y son ideales para aumentar los réditos de la compañía.
