En ese país suelen combinar la sustancia con sabores de mango o naranja para eliminar el olor intenso al solvente.
EL MUNDO - México -. Los llamados inhalables volátiles, como el thinner, ya no solo son usados por menores de edad en situación de calle sino también por hijos de familia de clase media, quienes -por moda- utilizan esa sustancia en reuniones y fiestas, aun cuando en el corto plazo esa aparente diversión se transforma en daños cerebrales, abandono escolar o del hogar e infecciones de transmisión sexual como VIH/SIDA.
La diversión al inhalar consiste en sentirse borrachos, sin haber consumido alcohol, así como tener alucinaciones. Caminar y hablar de manera errática para desatar la carcajada de los amigos. También reportan euforia, hiperactividad y placer. Incluso algunos lo hacen para tener, sin remordimiento, contacto con extraños durante juegos sexuales.
Se trata de un "problema serio de salud porque tiene efectos muy agresivos a corto plazo, como estados alterados de conciencia.Mientras crece el consumo se presentan episodios de paranoia, comportamiento agresivo y afectaciones respiratorias, que a su vez ocasionan convulsiones, estado de coma o llevan a la muerte por paro respiratorio", explicó Víctor Manuel Guisa Cruz, director general técnico normativo del Consejo Nacional contra las Adicciones(Conadic).